NUEVO SISTEMA DE COTIZACION PARA LOS TRABAJADORES AUTONOMOS POR LOS RENDIMIENTOS NETOS
El Gobierno ha aprobado un Real Decreto para implementar el nuevo sistema de cotización para los trabajadores autónomos por los rendimientos netos.
El Real Decreto introduce diferentes modificaciones reglamentarias para incorporar la mejora de información que tienen que aportar los trabajadores por cuenta propia respecto a su actividad, en particular, la información relativa a los rendimientos que prevean obtener el año natural en que se produce el alta. Este sistema resulta más flexible que el actual por cuanto permitirá a los trabajadores autónomos modificar hasta en 6 ocasiones las bases de cotización, esto es cada 2 meses, para adaptarlas rápidamente a sus rendimientos, en vez de las 4 actuales.
La entrada en vigor del nuevo sistema se producirá en Enero de 2023 y los tipos y bases de cotización se establecerán en la Ley de Presupuestos Generales del Estado.
A día de hoy Gobierno, agentes sociales y asociaciones de trabajadores autónomos están en fase de diálogo para fijar los tipos y bases de cotización a partir de 2023.
El objetivo es rebajar las cotizaciones de los autónomos con rentas más bajas, según vayan pasando los años hasta 2025, y un aumento progresivo de las cuotas de los trabajadores autónomos con rentas más elevadas.
En la última propuesta del Gobierno a las Asociaciones de autónomos, presentada el 28 de junio, el nuevo sistema entraría en vigor en 2023, con 15 tramos de ingresos reales con cuotas con una cuota mínima de 245 euros y una máxima de 500. En el año 2024 las cotizaciones se encontrarían entre los 237 y los 530 euros. Y finalmente, en 2025, las cuotas de autónomos quedarían encuadradas entre los 230 y los 590 euros.
La tarifa plana de 80 euros
Otro de los cambios importantes es la cuota reducida para los nuevos autónomos.
A partir de 2023 la conocida como tarifa plana para autónomos pasará a ser de 80 euros durante los primeros 12 meses, independientemente de los ingresos de la persona trabajadora. El segundo año el trabajador autónomo seguirá pagando los 80 euros mensuales, siempre que sus ingresos netos se encuentren por debajo del salario mínimo.
Finalmente, la persona trabajadora pasará a entrar en el nuevo sistema de cotización por tramos en función de sus ingresos reales.